Dermatitis Atópica
Sea cual sea nuestro tipo de piel, algunos factores pueden derivar o favorecer la sensibilidad excesiva: su piel reacciona con fuerza y, casi siempre, cuando no quiere que se manifieste...

¿Qué es la Dermatitis Atópica?
Fisiopatología de la Dermatitis Atópica
Hay tres factores que se ven involucrados en esta patología:
• Anomalías estructurales de la epidermis, que desencadenan en la piel sequedad, descamación y disminución de la permeabilidad, estando la piel en una posición más vulnerable
• Anomalías de la inmunidad donde hay un riesgo muy alto de colonización bacteriana, la piel se torna enrojecida, inflamada, caliente y presenta dolor
• Degradación de receptores y mediadores lo que desencadena la comezón intensa
Necesidades de la Dermatitis Atópica
Las necesidades a nivel de la piel se resumen en:
• Restauración de la barrera epidérmica de calidad
• Luchar contra el prurito
• Modular la respuesta inmune
• Mejorar la calidad de vida
• Reducir los síntomas
• Espaciar las crisis
• Disminuir el consumo de dermocorticoides
El tratamiento
• Cuidados emolientes, Se limpia, se hidrata para evitar las infecciones o sobre-infecciones. Y sobre todo calmar la piel
• Masajes emolientes y relajantes. El masaje con una crema hidratante (o emoliente) es un momento importante del día para el niño. Momento de suavidad, de calma, momento privilegiado de contacto y de intercambio con su madre o su padre
• Los dermocorticoides (respetando escrupulosamente el protocolo indicado por el médico para las aplicaciones, el recuento de tubos utilizados, etc.) prescriptos en los brotes de eccema